De pronto estaba vestida de blanco, con una mascada blanca y una flor de color verde que la sostenía sobre mi cuello...y comenzaban a felicitarme...primero mis hermanos, luego personas que ni conocía...me preguntaba el porqué, y de pronto me di cuenta de que en unos momentos más contraería nupcias...entonces comenzaron los nervios y caminé y caminé por varias cuadras, pasé otra iglesia más y ahí me encontré a algunos compañeros de la adolescencia que no he visto en años...y también los sabían! y ¡cómo es posible que lo sepan!- me decía a mí misma!...después de tiempo me caía el veinte de que era por mi vestimenta: un vestido blanco strapless, pegado y plisado en la parte de arriba, en la parte de abajo un poco esponjado, con tela muy suave...que hasta me gustaba...pero no!...y entonces comenzaba a correr...llegaba hasta una antesala del lugar donde me casaría. Había un espejo enorme, donde me paré de frente y analizaba mi rostro. Pasaba un muy buen amigo con su novia actual y le sugería a mi hermana (quien estaba encargada de mi arreglo personal, no sé por qué demonios!) una forma de maquillarme los ojos para disminuir el efecto de mirada triste que me caracteriza...quería golpearlo! no sé si por lo que sugirió, que me pareció bastante acertado, o porque lo dijo frente a su novia! (él: cabello corto, sombrero, de negro...y ella: con un jumper de cuadros amarillos con azules...que dennotaba que no era su voluntad estar ahí).
Y entonces ellos se fueron para sentarse entre los invitados, no sin antes felicitarme y abrazarme. Y yo seguí pasmada, mientras me colocaba el rímel de miel en mis pestañas. Y pensaba en el pavor que me daría pasar frente a toda esa gente.
Poco después me regresaba a la realidad la voz de "Jaimoso", buen amigo y padrino adoptivo...me decía que todo estaría bien, que sabía que no me iba a echar a correr, que tenía que entrar, pues sólo me estaban esperando a mí...comencé a oír la música de entrada ( Claro de Luna de LVB) ...y tomé valentía de mis piernas y las obligué a avanzar.
Al colocarme en la entrada, ví una enorme rampa que descendía y medía cerca de 25 metros, y veía a lo lejos a un sacerdote.Yo llevaba zapatos de tacón, pero opté por cambiarlos por unos "flat", que no sé de donde los saqué, para evitar que resbalara. Me fui aproximando, pero como a los cinco metros sentí la necesidad de avanzar cada vez más rápido, por lo que casi troté para llegar al final. ¡Pero el sacerdote ya estaba iniciando la ceremonia! y todos comenzaban a reír de mi aparición repentina.
Cuando al fin llegué al fondo del camino, me dí cuenta de que había una pareja de novios a punto de contraer matrimonio frente a mí...mi cabeza giró y vió miles de personas carcajeándose de lo que estaba pasando...me di cuenta de que era un iglesia enorme, donde aproximademente cada 10 metros había una pareja a punto de casarse...y mi novio ¿dónde estaba? ¿me estaría esperando?...entonces no me quedó más remedio que retroceder y reírme de mí...comencé a caminar entre la gente hasta el inicio del pasillo, porque yo sentía que tendría que comenzar de nuevo mi camino...cuando casi llego al inicio...aún con el dolor de estómago por tanta risa...volteé hacia el final de la rampa y había alguien, supuse que ése era mi camino...y que la figura que se veía al fondo...casi un punto negro, estaba esperándome, pero ya no ví quién era...me desperté.
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